02 abril 2012

Una silla en el recuerdo


Quedo silencioso

monumento
una silla
esperando
sus habitantes.
Gigante
mirando al pasado.
Desde ahí
ningún
humano
sintió
los gritos
desgarrados,
en ese silencio
donde un corvo
cercenó
los sueños
rojos
de tres vidas.
Recuerdo
cuando
formamos
una cadena
telefónica
de luz
y llanto.
Viejo Manuel
poeta
novelista
rodeado de
sembrados de
amor
Victoria
suave
y dulce
miel
y espesura.
Francisco
viejo
de sonrisas
y mirada amable.
Tai, Libertad
bella
y pensativa
fue un abrazo
de universo
y pájaros
desorientados
cayendo
mientras
oíamos
la radio
y nos
aferrábamos
a la esperanza.
Tres
muertos,
tres en una zanja
del planeta.
tres horrores
del fascismo.
Tres dolores
sobre
tres
generaciones
Tres
ideales,
tres
sublimes
ternuras
Tres mundos
al margen
de la historia
Tres
soles
en nuestros
signos.
La silla
estará
esperando
silenciosa
sus ocupantes.
Mientras
nosotros
los transeúntes
llevaremos
cantos
o flores
en una caravana
permanente
porque
ellos
serán siempre
los que nos
recuerden
que el olvido
es muerte
una lágrima
una abrazo
una fotografía
en el pecho
estrechar
las manos
mirarnos con ternura
amanecer
cada día
con esos ideales
ver los nidos
sentir un trino
recorrer
el sendero
de las hormigas
ver perderse
en el horizonte
una mariposa
amar, amar seguir
amando
es nuestro
triunfo
y el tuyo Manuel,
Santiago
José Manuel…